El uso del fuego por humanos en España se remonta a 250,000 años

El uso del fuego por humanos en España se remonta a 250,000 años

Desde tiempos inmemoriales, el fuego ha sido una herramienta fundamental para la supervivencia humana.

Un nuevo estudio, publicado en la revista Scientific Reports y difundido por Europa Press, ha revelado un descubrimiento asombroso: los primeros habitantes de Europa ya producían y controlaban el fuego hace al menos 250,000 años, 50,000 años antes de lo que se creía.

Este hallazgo, ubicado cerca de lo que hoy es Madrid, cierra una brecha en nuestra comprensión del fuego controlado por humanos y del desarrollo evolutivo.

El fuego no era fácil de controlar

Hace miles de años descubrir el fuego fue algo accidental. Y luego controlarlo se convirtió en una tarea difícil de lograr. Actualmente, el control del fuego es una destreza cotidiana, pero la prevención sigue siendo clave.

Invertir en una caja fuerte ignífuga se presenta como una salvaguarda esencial hoy en día. Esto era algo que no pasaba antes, pues las posesiones eran escasas o casi nulas en la época de la prehistoria.

Aunque el fuego pueda manejarse, la preservación de posesiones vulnerables es una prioridad. En cualquier cerrajería de Barcelona, podrás encontrar cajas fuertes ignífugas que ofrezcan un refugio para documentos importantes, dispositivos electrónicos y objetos de valor.

La compra de una caja fuerte ignífuga es solo el primer paso. Desde el hogar hasta negocios, esta precaución se convierte en un escudo invaluable contra eventualidades imprevisibles.

Rastros de fuego en Valdocarros II

El uso del fuego por humanos en España se remonta a 250,000 años

El equipo de investigación de la Escuela de Energía, Geociencia, Infraestructura y Sociedad de la Universidad de Heriot-Watt ha llevado a cabo excavaciones en Valdocarros II, revelando rastros de fuego que ofrecen una visión única de la vida cotidiana de nuestros ancestros.

El Dr. Clayton Magill, profesor asistente en Heriot-Watt, describe el hallazgo como «muy emocionante» y señala que «cierra una brecha en nuestra comprensión del fuego controlado por humanos y el desarrollo humano».

Los restos quemados encontrados en un patrón específico indican que los humanos estaban controlando el fuego para diversos propósitos.

Cocinar, calentarse y defenderse eran algunas de las funciones clave que el fuego desempeñaba en sus vidas. La disposición de estos restos sugiere la presencia de una estructura organizada, quizás una casa, área para dormir o cocina.

Este hallazgo arroja luz sobre cómo las comunidades humanas tempranas estructuraban su entorno y utilizaban el fuego de manera consciente.

Papel del fuego en el desarrollo humano

El descubrimiento no solo demuestra la habilidad temprana de los humanos para controlar el fuego, sino que también destaca la importancia evolutiva de esta habilidad.

Poder cocinar alimentos no solo brinda una fuente de nutrición más eficiente, sino que también ha sido fundamental en el desarrollo de cerebros más grandes a lo largo de la evolución humana.

Además de proveer alimento, el fuego ha servido como protector, facilitador de la comunicación y constructor de conexiones familiares.

Aunque la evidencia más antigua de fuego controlado por humanos se registró en el este de África hace aproximadamente 1.5 millones de años, este hallazgo proporciona una nueva perspectiva sobre la dispersión y adopción temprana de esta habilidad en Europa.

La capacidad de controlar el fuego ha sido una constante en la historia humana, y este descubrimiento contribuye a una comprensión más completa de nuestro pasado prehistórico.

Lecciones de nuestros antepasados

En este emocionante viaje al pasado, descubrimos que nuestros antepasados europeos ya eran maestros del fuego hace un cuarto de millón de años.

Más allá de la supervivencia, el fuego desempeñó un papel crucial en el desarrollo humano. La capacidad de cocinar, calentarse y defenderse no solo alimentó nuestros cerebros, sino que facilitó la comunicación y conexión familiar.

Nuestras habilidades para dominar el entorno y utilizar herramientas como el fuego han sido esenciales para nuestro éxito evolutivo. En la inmensidad de nuestra historia, vemos inspiración para comprender y apreciar nuestro presente.